Colectivo Licuado, el dúo uruguayo que conquista Latinoamérica

Así como Brasil ofrece a Os Gêmeos y Argentina posee a Grupo Sismo, Uruguay cuenta con Colectivo Licuado, dueto formado por Florencia Durán y Camilo Núñez que ha dejado su huella en América, Europa y Asia.

La dupla uruguaya que conquista el arte latino

Conformado por Florencia “Fitz” Durán y Camilo “Theic” Núñez y con el año 2010 como punto de partida, Colectivo Licuado es un dúo artístico uruguayo sensación en el arte de Latinoamérica. Con obras en distintas partes del mundo como Montevideo, Buenos Aires y Berlín y un estilo que mezcla influencias del muralismo clásico con técnicas contemporáneas del arte urbano, la dupla se ha instalado como una de las agrupaciones más populares tanto a nivel nacional como internacional.

Colectivo Licuado, el dúo uruguayo que conquistó el arte latinoamericano (El Observador).

Un poco del currículum de Colectivo Licuado

Creada en el marco del Festival Urbano Barrio Arte en Chile, “La mujer sin fronteras” es una de las obras más emblemáticas del dúo artístico uruguayo. La pieza representa la imagen de Elodie Arshak, amiga de la dupla, sentada arriba de un globo terráqueo mientras escribe una bitácora de viaje. Otro ícono fundamental en el currículum de Colectivo Licuado es la intervención en uno de los patios del Cabildo de Montevideo, uno de los edificios más históricos de la capital uruguaya. Ante la desproporcionada cantidad de obras de artistas masculinos sobre femeninos en la colección de obras que integran el establecimiento, el dúo retrató las figuras de Petrona Viera, María Freire y Leonilda González, tres artistas mujeres. Realizado en Fanzara, España, y en representación de los cosechadores de la zona, “La cosecha” también forma parte del amplio y espectacular repertorio artístico de la dupla uruguaya conformada por Florencia Durán y Camilo Núñez.

“La mujer sin fronteras”, obra de Colectivo Licuado en Chile (PerezBozo).

Las pinceladas distintivas de la dupla charrúa

Uno de los rasgos más distintivos en las obras es la representación de figuras humanas. Sus murales suelen mostrar personajes con vestimentas tradicionales o elementos simbólicos que conectan con la historia y la idiosincrasia del lugar donde pintan. Además, utilizan una paleta de colores terrosos y vibrantes con un marcado uso de contrastes que le otorgan profundidad y dramatismo a sus creaciones. La estética del dúo también se distingue por su meticulosa composición y la precisión en los detalles, lo que les permite generar imágenes de gran impacto visual.