
Scream y Viernes 13 colisionan con el misterio de Scooby-Doo y la oscuridad de Merlina Addams. Enterate cómo conseguir todas las recompensas antes del 1 de noviembre.
DEPORTES
El Esports Stadium Arlington tiene 9.300 m2 de espacio total y capacidad para 2.500 espectadores sentados [Imagen], por Sports Video Group.
Desde estadios olímpicos hasta canchas de la NBA y NFL, los eSports salieron de su nicho para llenar recintos deportivos icónicos en todo el mundo y demostrar que los videojuegos competitivos son un espectáculo masivo. Esta transformación convirtió a arenas diseñadas para deportes tradicionales en templos del gaming, donde miles de fanáticos se reúnen para ver a sus héroes digitales competir por premios millonarios.
Inaugurado en 2018, el eSports Stadium de Arlington, Texas es el primer recinto diseñado exclusivamente para los deportes electrónicos. A diferencia de otros lugares adaptados, este estadio fue construido con las necesidades de los jugadores y el público en mente.
Este estadio fue el escenario de las finales del campeonato de FACEIT para CS:GO, donde el equipo Astralis se coronó campeón y se llevó la mayor parte de un premio acumulado de 750.000 dólares. También, fue sede de torneos de Fortnite y Valorant.
Construida para los Juegos Olímpicos de Verano de 2012, la Copper Box Arena en Londres, Reino Unido, se reconvirtió rápidamente para recibir competiciones de videojuegos. En 2014, el recinto se asoció con Gfinity para organizar el evento G3, que incluyó FIFA 14, StarCraft II y Call of Duty: Ghosts. Además, la arena es la casa del equipo londinense de Call of Duty, los Royal Ravens.
La Spodek Arena en Katowice, Polonia es un lugar de peregrinación para los fanáticos de CS:GO y League of Legends (LoL) en Europa del Este. Gracias a la colaboración entre ESL y la Intel Extreme Masters, el estadio fue sede de torneos legendarios desde 2013. El IEM Katowice 2019 es un ejemplo destacado, donde se repartieron 2.5 millones de dólares en premios entre competiciones de CS:GO, Dota 2, y StarCraft II, y la presencia de más de 174.000 fanáticos.
Spodek es uno de los recintos deportivos y de entretenimiento más grandes de Polonia.
Originalmente conocida como The SSE Arena, esta instalación de Londres, Reino Unido, con capacidad para 12.500 personas, se unió al mundo de los eSports en 2014, cuando Riot Games la eligió para albergar la League Championship Series (LCS). Más recientemente, el estadio fue anfitrión de los playoffs del Major Championship de CS:GO.
Suecia es una cuna de equipos legendarios como Ninjas in Pyjamas y Fnatic, por lo que necesitaba tener una arena a ese nivel. De esta manera, encontró su meca de los eSports en la Arena de Malmö. El estadio fue la sede inaugural del DreamHack Masters en 2016, un torneo que puso a 16 de los mejores equipos de CS:GO a competir por 250.000 dólares. El evento volvió a Malmö en 2017 y 2019, con victorias para G2 Esports y Fnatic, respectivamente.
Inaugurada en 2017, la Royal Arena de Copenhague, Dinamarca, es un importante escenario para los eSports. Un año después de su apertura, el Campeonato Europeo de LoL celebró allí sus Spring Split Finals. Además, fue la sede de las BLAST Pro Series de CS:GO.
Un recinto de 35.000 m2 para 16.000 espectadores en el centro de la capital danesa [Imagen], por DAS AUDIO.
Conocida por muchos como KeyArena, la Climate Pledge Arena en Seattle, Estados Unidos, es un nombre sinónimo de The International, el campeonato más grande de Dota 2. Desde 2014 hasta 2017, la arena fue el campo de batalla de este torneo, con premios que superaban los 11 millones de dólares. En 2017, Valve rompió un récord por sus 24.7 millones de dólares en premios. El lugar se cerró por remodelación en 2018, pero dejó una huella imborrable en la historia de los eSports.
Cuando KeyArena se cerró, la Mercedes-Benz Arena de Shanghái, China, tomó el relevo como sede de The International. La cooperación con Valve comenzó en 2016 con el Shanghai Major, pero en 2019, el estadio acogió The International con un premio acumulado sin precedentes de 34 millones de dólares. Semanas después, la arena recibió las finales regionales de la LoL Pro League.
El icónico Staples Center de Los Ángeles, Estados Unidos, hogar de los LA Lakers, se unió a la historia de los eSports con las finales del Campeonato Mundial de LoL en 2013 y 2016. La victoria de SK Telecom T1 en ambos años se sintió como un déjà vu, pero sus ganancias se duplicaron en 2016, cuando el premio total del torneo alcanzó los 5 millones de dólares. Aquella final de 2016 atrajo a 43 millones de espectadores vía streaming y lo convirtió en uno de los eventos de eSports más vistos de la historia.
Construido originalmente para la Copa Mundial de la FIFA de 2002, el Estadio Sangam en Seúl, Corea del Sur, se unió a la élite de los eSports en 2014. El recinto recibió la final del Campeonato Mundial de LoL, un evento que vendió 45.000 entradas y tuvo una audiencia total de 27 millones de espectadores, gracias al streaming. La final vio al equipo coreano Samsung Galaxy White llevarse un millón de dólares.
El techo de este escenario se asemeja a una cometa tradicional coreana, el hanji.
La popularidad de los deportes electrónicos cambió radicalmente el panorama del entretenimiento y creó una nueva cultura que llena los mismos estadios que supieron ser exclusivos para el fútbol o el baloncesto. El reconocimiento oficial en varios países sugiere que este es solo el comienzo.
También puede interesarte
Scream y Viernes 13 colisionan con el misterio de Scooby-Doo y la oscuridad de Merlina Addams. Enterate cómo conseguir todas las recompensas antes del 1 de noviembre.
La neerlandesa se llevó el duelo final ante la surcoreana Waackxxxy en Los Ángeles y se grabó en la historia de la élite del baile improvisado internacional.