Una nueva y empoderada voz desafía escena musical global

En el crisol de la contemporánea escena musical, donde los ritmos urbanos palpitan con la fuerza de las ciudades, surgió con ímpetu y singularidad la figura de Lismar, una joven artista dominicana de apenas 19 años. Con su irrupción, sacudió los cimientos de la industria. Desde el barrio de Los Mina, en Santo Domingo, hasta la consagración de su talento en colaboraciones de alto calibre, como la sesión con Bizarrap, en esencia, encarna la fusión perfecta entre las raíces profundas y una gran ambición por triunfar. 

Lo último

El último lanzamiento de la artista se trata de un freestyle titulado "LA LISTA". Esta canción tiene la particularidad de estar disponible exclusivamente en su cuenta de Instagram. Esta decisión de distribución se diferencia de sus lanzamientos anteriores, que generalmente se encuentran en plataformas de streaming como Spotify o YouTube. 

La colaboración con Bizarrap

La Music Session #60 producida por Bizarrap representó un punto de inflexión crucial en la carrera de Lismar, catapultándola a la fama internacional. Esta colaboración amplió su audiencia de manera exponencial y validó su talento ante una audiencia global. El impacto fue inmediato y masivo, con un alcance de 12 millones de reproducciones en YouTube en un tiempo récord. 

^{[Video], por Youtube/ @bizarrap.}

Primeros pasos

Patricia Lismary Fernández Soto, el nombre detrás del seudónimo Lismar, desde muy corta edad, demostró una profunda inclinación por las artes. Tuvo una formación artística integral y diversa, que incluyó el estudio de la guitarra, canto, baile, pintura y piano. Esta educación multifacética nutrió su creatividad y le proporcionó una base sólida y una amplia gama de herramientas para expresarse artísticamente. 

La pandemia como catalizador 

El período de aislamiento durante la pandemia fue un poderoso catalizador para la expresión creativa de Lismar. A la edad de 16 años, encontró en la composición de canciones una forma de canalizar sus emociones. Exploró el mundo del freestyle, perfeccionó su habilidad para la improvisación y el manejo del lenguaje en el rap. Las plataformas virtuales se transformaron en su escenario inicial, donde compartió su talento y comenzó a ganar reconocimiento entre una audiencia cada vez mayor. Fue en este contexto que canciones como "A mi mamá", "Se llenan", "Biografía", "Modo avión" y "Nota" comenzaron a circular y a resonar con el público. 

Los Mina

República Dominicana es una cuna inigualable de artistas internacionales. Sin embargo, las realidad social no es la mejor. El barrio de Los Mina tiene una historia compleja y desafiante. Fue una zona de alta peligrosidad, marcada por la violencia. Numerosas personas perdieron la vida en este entorno, víctimas de homicidios. De todas formas, Lismar siempre se encarga de agradecer haber crecido en este lugar, donde ella y su familia estuvieron protegidas. Considera que ese entorno la influyó como artista y como símbolo de agradecimiento, hacer su mansión allí.

Un mensaje de empoderamiento

Lismar se distingue por una notable confianza en sí misma. Sus letras son un reflejo directo de la realidad que la rodea, con el abordaje de temas de la vida en la calle con una crudeza y sinceridad que resuenan con su audiencia. En sus canciones, no solo cuenta su propia historia, sino que también da voz a las experiencias y aspiraciones de una generación.

^{Lismar fue invitada a participar de los show que realizan desde "colors", una plataforma que permite mostrar tu música, a nivel mundial, a nuevos públicos [Imagen], por Billboard.}

Lismar se proyecta como una figura prominente y con un futuro brillante en la música urbana. Con cada nuevo proyecto, Lismar desafía las expectativas, explora nuevas sonoridades y profundiza su mensaje. Construye una carrera exitosa y deja huella en la cultura. Con su talento innato, es una voz prometedora de la música urbana contemporánea.